Cocinar con niños
La mayoría de los niños pequeños adora "ayudar" en la cocina. Como ventaja adicional, involucrarse en la preparación de la comida puede alentar a tu niño a crear hábitos saludables de alimentación. Así es como puedes aprovechar al máximo el tiempo con tu pequeño chef.
Elige una receta fácil. Ten en cuenta la edad y nivel de desarrollo de tu hijo al elegir un plato. Algo como una combinación de frutas y yogur es ideal dado que requiere pocos ingredientes. A los niños pequeños les gusta meterse los dedos en la boca, así que evita cualquier cosa que pudiera exponerlos a ingredientes crudos potencialmente peligrosos (como masa de galletas que contiene huevo crudo, por ejemplo).
Vayan juntos de compras. Estimula el desarrollo de tu niño haciendo de las compras una experiencia de aprendizaje. Al tomar productos de los estantes, háblale a tu niño sobre qué le aporta cada uno alsabor del plato ("¡Estos arándanos harán que los panecillos sepan dulces!"), pregúntale si quiere pimiento rojo, amarillo o verde en su ensalada, o dale una lección básica de deletreo señalando las letras en los envases.
Delega tareas simples. Tareas en la cocina adecuadas para los niños pequeños pueden ser lavar la fruta, colocar azúcar u otros ingredientes, revolver y aplastar. Un juego divertido para un niño más grande es colocar arándanos en panqueques listos con forma de caras sonrientes o la inicial de su nombre.
Supervisa todo. Las precauciones y la supervisión permanente en la cocina son clave. Explícale lo que no debe tocar, como batidoras en funcionamiento, utensilios filosos y superficies calientes. Asegúrate de colocar siempre las ollas con las manijas hacia adentro para evitar accidentes.
Halaga la destreza de tu hijo en la cocina al probar los platos juntos, y aunque pueda ser difícil, intenta ignorar el estado y limpieza de tu cocina. Lo importante es que estás estimulando la confianza de tu hijo alentándolo a dominar nuevas habilidades y probar nuevas comidas. ¡Disfrútalo!
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